SOFIA, Bulgaria.— Un invitado no esperado se dejó ver en la concentración de la selección de voleibol femenil sub 18 de México.
Curiosamente, durante una de las prácticas previas a los encuentros ante equipos búlgaros, ingresó al gimnasio un murciélago que por momentos interrumpía los entrenamientos.
A plena luz del día, el roedor se dejaba ver por toda la cancha, como si deseara llamar la atención de las visitantes, provocando que los entrenamientos se suspendieran por unos minutos.
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| El roedor volador, terminó reposando en la cancha. |
No fue sino hasta la jornada nocturna y al término de uno de los encuentros entre México y Bulgaria, que nuevamente el “alado” aficionado hizo acto de presencia, nuevamente volando sobre el gimnasio, aunque ya con un cansancio notorio.
El murciélago simplemente planeó y aterrizó sobre la cancha, fue rescatado por las jugadoras del cuadro de Bulgaria, que sigilosamente lo observaban junto con las de México, y sacado envuelto en una toalla a uno de los baldíos cercanos al gimnasio.
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